Let's See [Libre~]

El entrenamiento había sido cosa de lo que había disfrutado, después de todo, siempre le había atraído el medio acuático. Su cuerpo a pesar de sumergido en el agua resumaba calentura. Los músculos vigorosos en extremo trabajados debido al esfuerzo para desplazarse con mayor velocidad bajo la masa de agua.

Respiró hondo bajo el chorro de agua que corría por su torso y espaldas, más perdido en sus ensoñaciones que atendiendo a lo que realmente sucedía en el momento. Llevó los dedos untados con shampoo y los deslizó por la corta cabellera. En cuestión de segundos ya estaba la abundante espuma resbalando en túmulos estratégicos que acariciaban tan bien esa anatomía morena.

Blanco contrastando con la piel morena, el frío del agua con lo caliente de la piel y aquello ojos verdes que de pronto giraban hacia la puerta. Alzóse en las punta de sus pies para lograr ver a la fémina que ingresaba, parecía interesada en el aseo personal – Vaya… alguien que me talle la espalda – pensamientos ridículamente acalorados mientras ya sostenía su propia verga entre las manos – He… ¿Qué pasó por ahí? -.

No escuchaba más que las regaderas,pero nadie parecía asomarse ¡Que aburridos eran! Por eso los hombres no llegaban a mucho, siempre tan reservados, tan serios o pelados en su defecto. ¿Qué debía hacer? El humo de las duchas apena y salia de algunas regaderas ¿Así eran los baños masculinos? Pero que aburridos.. ¡Siempre se los había imaginado diferente!

Siguió su camino de lo más despreocupada, hasta que escucho que alguien respondía, alguien hablaba, busco con su mirada al dueño de aquella ronca voz. Y lo vio, un moreno de cabello corto, negro, parecía un chico puberto cualquiera, pero sus ojos eran llamativos, es verde era lindo y agradable a simple vista. Aún así no juzgaría, en absoluto, se encamino haciendo resonar las botas blancas largas que tenía, de suficiente plataforma, para quedar frente a la puerta.

- Hello darling~ ¿Esta bueno el baño? -Le guiño un ojo y se poso frente a la puerta, mientras alzaba la mano derecha haciendo una señal de victoria, inocente y tranquila, así mismo se encogió de hombros y ladeo el rostro, mirándole.- ¿Cómo estas, little monster? -Dijo mientras se puso las manos en la nuca después, jugando un poco con sus pies, moviendo uno de adelante a atrás de lo más desinteresada.